¿Estás en edad de jubilarte o en una edad muy próxima a esta franja?, ¿Tienes miedo de jubilarte de golpe y te gustaría hacerlo de manera progresiva?
Pues bien. Antes de tomar ninguna decisión debes saber que existen muchas opciones a las que puedes aspirar en lo que a jubilación respecta. Como por ejemplo, optar por la jubilación flexible.
Pero, ¿Qué es eso de la jubilación flexible?, ¿Es algo que tenga letra pequeña? Y lo que es más importante; ¿Cómo afecta la misma a la percepción de la pensión y a la cotización de la seguridad social?
Si realmente formas parte del público objetivo al que puede interesarle saber un poco más sobre esta modalidad de jubilación, te recomendamos que prestes atención a las siguientes líneas; ya que en ellas podría estar la clave de tu plan y proceso de retiro perfecto.
¿Qué es la jubilación flexible?
Se habla mucho de jubilación flexible, pero realmente, ¿Qué es la jubilación flexible?, ¿En qué consiste esta modalidad?
Como tal, la jubilación flexible es una forma de jubilación que permite a quien la percibe compatibilizar o alternar los periodos de cobro de pensión y de cotización a la seguridad social. Así explicado parece muy sencillo y sobre todo muy obvio que no se trata, como tal, de una jubilación; sino de una reducción de jornada para la preparación progresiva para el retiro.
De todas formas, las condiciones y detalles que determinan la naturaleza de esta modalidad de jubilación son muchas y muy numerosas. Es por ello, que quien vaya a optar por la jubilación flexible, debe conocer fundamentalmente que:
- La cantidad de pensión que va a percibir será proporcional a una porción de lo cotizado a lo largo de toda su vida laboral.
- La existencia de unos límites de jornada prefijados que hacen que no se puedan sobrepasar los porcentajes del 25% y el 75% a la hora de cobrar o trabajar.
- Detalles que pueden marcar la diferencia a la hora de determinar la elección de esta modalidad como beneficiosa o perjudicial a efectos prácticos.
Reducción de jornada
Tal y como hemos introducido en el epígrafe anterior, dentro de lo que es la modalidad de jubilación flexible existen unos límites dentro de los cuáles puede reducirse la jornada laboral de la persona que opta por ella.
Estos límites de reducción de jornada son el 25% y el 75%; lo cual significa que existen subtipos de jubilaciones flexibles dependiendo de las horas en el puesto de trabajo que la persona perceptora haya escogido que va a conservar.
Así, dentro de la modalidad de jubilación flexible, puedes aspirar como perceptor a las submodalidades de:
- Jubilación activa
- Jubilación parcial.
Todo ello dependiendo de dónde decidas colocar tu propio porcentaje de reducción de jornada.
Cotización de la jubilación flexible
Es obvio que si optas por jubilarte de manera flexible, empezarás a percibir parte de tu pensión antes del tiempo que de manera normal te correspondería. Con lo cual, debes saber que las cotizaciones realizadas dentro de los marcos de esta modalidad de jubilación afectan de manera directa a la cuantía de pensión definitiva que vayas a percibir en el momento en el que la fase de jubilación flexible haya llegado a su fin.
La pregunta a resolver es la siguiente: ¿Cómo afecta la jubilación flexible al total de tu pensión definitiva?
La prestación de servicios que el beneficiario haya realizado en jornada reducida, en paralelo a su jubilación parcial, hará que la cotización de todas esas horas de trabajo, afecte al recálculo del cómputo total de la pensión a percibir, una vez la jubilación sea completa y definitiva.
Esto significa que se le sumará al total de la pensión, el resultado del cálculo derivado de las horas que hayas trabajado a jornada parcial, mientras haya durado tu periodo de jubilación flexible; lo cual es muy buena señal.
Además, siempre que no exista una causa de exoneración al respecto, podrás cotizar por horas trabajadas bajo cualquier concepto. Lo cual hace que el margen de actividades se amplíe de manera considerable y se ofrezca esta posibilidad a un número mayor de potenciales beneficiarios.
Jubilación activa
La jubilación activa se caracteriza por percibir un 50% de la pensión, y trabajar de manera ilimitada; lo cual en nada se parece al estado de jubilación. Puede decirse que esta última modalidad es perfecta para aquellas personas que necesiten más ingresos en sus últimos años en activo y por esta razón deciden acogerse a esta modalidad para empezar a cobrar porcentajes de la pensión de manera adelantada sin dejar de cotizar.
Jubilación parcial
La jubilación parcial está más enfocada a trabajadores que siguen en activo, y que ya han sobrepasado la franja de edad de los 60 años. Todo ello, porque se trata de una modalidad con condiciones diferentes en el caso de que el beneficiario sea una persona con contrato de relevo o no.
1-En el caso de que el beneficiario cuente con un contrato de relevo:
- Edad mínima de 60 años.
- Podrá acogerse a esta modalidad con unos porcentajes de actividad de entre el 25% y el 50% (salvo algunas excepciones mencionadas por disposiciones transitorias que elevan el porcentaje a una reducción de la jornada del 75%).
- El INSS, complementara las bases y años de cotización al 100%.
2- Si el beneficiario no tiene un contrato de relevo,
- Edad ordinaria de jubilación.
- Computo de las cotizaciones efectuadas durante el trabajo a tiempo parcial por su valor real, sin el incremento hasta el 100% o las que hubiera correspondido de trabajar la jornada completa.
- Llegado el momento de la jubilación total, se optara por la opción más ventajosa entre: contabilizar las últimas bases, que al ser a tiempo parcial serán inferiores y puede que le baje la base reguladora, o bien que reconozcan las bases que tenía cuando se jubiló parcialmente revalorizada.
Diferencias entre Jubilación Flexible, Jubilación Activa y Jubilación Parcial
Lo primero que debes saber, es que las tres modalidades permiten compatibilizar el trabajo con el cobro de un porcentaje de la pensión. Sin embargo, las casuísticas y las características en las que esto ocurre son diferentes en cada caso.
Las diferencias entre las tres modalidades son, sin embargo, las siguientes:
- La jubilación flexible se entiende que es, como tal, una modalidad a la que deben aspirar las personas que ya han estado previamente jubiladas y quieren volver a trabajar por cualquier motivo. Se recalculara la pensión en función a la nueva cotización.
- La jubilación activa, permite al trabajador jubilarse, percibiendo el 50% de la pensión y compatibilizarlo con el trabajo a tiempo parcial o completo.
- La jubilación parcial, una vez cumplidos los 60 años y cumpliendo unos requisitos, permite lareducción de la jornada será como mínimo del 25% y máximo del 50%, o, excepcionalmente del 75, compatibilizándolo con la pensión en la parte proporcional.
Jubilación Flexible para autónomos
En el caso de que seas autónomo y quieras aspirar a la jubilación flexible, no te preocupes porque también existen opciones para ti dentro de esta modalidad.
En tu caso, podrás seguir cotizando entre el 25% y el 50%; solo que para poder percibir la pensión al mismo tiempo, tu rendimiento neto no puede exceder el salario mínimo interprofesional anual.
Además, esta modalidad la puedes compatibilizar con el mero de hecho de ser titular de un negocio con las obligaciones que pueden desprenderse de esta titularidad (aunque no sean comprendidas como prestación de servicio o actividad laboral como tales).
Requisitos para obtener la Jubilación Flexible
Los requisitos con los que debes cumplir para obtener la jubilación flexible son los siguientes:
- Cotizar a la Seguridad Social bajo cualquier régimen civil, exceptuando los funcionarios del estado.
- No estar percibiendo una pensión por incapacidad permanente.
- No reducir la jornada en más de un 75%
- En algunos casos especiales, haber cumplido ya los 60 años (dependiendo de las submodalidades).
Cómo solicitar la Jubilación Flexible
El procedimiento para solicitar la jubilación flexible es sencillo y está al alcance de cualquier persona. Puedes consultar más sobre este tema en la web de la Seguridad Social.
Consiste en llamar al número 901 10 65 70 y responder a todas las cuestiones que se plantean para poder tramitar el cambio de régimen en tu expediente.
Cómo se calcula la jubilación flexible
El cálculo de la cuantía de la pensión es también bastante sencillo, ya que no se diferencia demasiado del cálculo de una pensión al uso.
Lo único que debes apreciar es la base reguladora y la forma en la que afectan a ella los años cotizados (incluyendo los años cotizados de manera parcial y dentro de este nueva modalidad a la que te has acogido).
Al margen de la cotización total, deberás sumar la parte afectada a la nueva modalidad con sus nueva cuantía de horas a la base reguladora.
Conclusiones
La conclusión principal es que el nombre que recibe la modalidad de jubilación flexible le hace justicia al propio régimen, ya que hay muchas circunstancias bajo las que puedes unirte y muchos porcentajes que tú mismo puedes adaptar a la forma de trabajar que deseas para tus últimos años de vida profesional.
Si necesitas asesoramiento laboral sobre este tipo de casos, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de poder asesorarte.